El paso de la ancianidad en la población colombiana se puede creer con los datos y proyecciones del porcentaje de personas mayores de sesenta (60) años y la esperanza de vida de estas. El porcentaje de personas mayores de 60 años en el 2000 alcanzó el 6.8% y para el 2050 alcanzará el 21.7%. La esperanza de vida de los hombres y las mujeres estará entre los 74.11% y el 74.4% en el 2050 respectivamente.
Con estos datos estadísticos podemos pensar en promover la forma como debemos tomar seriamente la situación de los adultos mayores, y buscar el modo de prevenir y desarrollar políticas específicas y orientadas a atender el fenómeno de envejecimiento y vejez. Pero no quedarnos solamente en el análisis del envejecimiento, sino, también en la situación de pobreza y miseria que viven continuamente.
“las transformaciones que sufre el Distrito por razón de los movimientos migratorios y el incremento acelerado del fenómeno de desplazamiento forzado por causa de la violencia, asociado al crecimiento propio de la ciudad y a la recesión económica del país, hace que amplios grupos de población padezcan los efectos de la pobreza y la miseria y se comprometa no sólo el futuro de las generaciones inmediatas sino la subsistencia de la población vieja.”
La Constitución Política de Colombia de 1991, en su gran sabiduría, busca ajustar en la realidad, la situación que se vive en nuestro país los grupos de la tercera edad, la cual, esta en la obligación el estado buscarle un mejor vivir.
En el artículo 46, menciona:
“El Estado, la sociedad y la familia concurrirán para la protección y las asistencia de las personas de la tercera edad y promoverán su integración a la vida activa y comunitaria.”
Observando de cerca la situación y teniendo en cuenta las Políticas del Plan de Desarrollo, miramos la inserción de la población vulnerable y orientar a crear escenario de mayor autonomía, con responsabilidad tanto individual como colectiva y atendiendo a su objetivo general donde se establece como propósito…”la compañía justa y amable con los viejos”… para darle cumplimiento al articulo 46 de la Constitución Colombiana.
Realizando la indagación de los casos, que se llevaron a cabo, la cual, arrojo varias reflexiones, como:
• Problemática socio- cultural y económica que afecta a los adultos mayores de esta localidad.
• Inquietud de las personas, frente a los procesos que se estaban desarrollando.
• Estudio de las necesidades que presentan los adultos mayores en esta localidad.
• Asignar recursos para la compra del Hogar para el adulto mayor en donde se tendría un lugar de encuentro, para realizar actividades recreativas, productivas, atención médica y sicológicas, y además, dictar charlas y talleres para el mejoramiento de auto-estima y manejo correcto del personal hacia el adulto mayor.
Desde esta perspectiva se deben establecer proyectos para la atención del adulto mayor teniendo en cuenta el crecimiento de mismos, y notando los altos índices de pobreza y miseria, y a la vez obtener un sitio donde se pueda reunir al adulto mayor, para sus actividades como tal.
Uno de los instrumentos para soportar los criterios de selección de los beneficiarios es el SISBEN, se tiene la convicción, que este instrumento por sí solo, aunque muchas veces no refleja las múltiples exclusiones y vulnerabilidades que caracterizan la población Adulta Mayor pobre, pero es el única herramienta que tenemos a la mano; realizando los procedimientos y tramites esenciales, para evitar las fallas en los criterios de selección de los beneficiarios para focalizar acertada y equitativamente la inversión.
Ahora, por el lado del distrito, su Compromiso es facilitar los recursos económicos necesarios, para la compra del inmueble donde se ubicaría el hogar de paso del adulto mayor.
En esa sede, fundamentalmente el objetivo es concebir unos servicios de bienestar básicos, sostenibles y viables, que tengan efectivo impacto social para la ciudad, de tal manera que trascienda a las administraciones y se garantice su permanencia en el tiempo.
En consideración, “Toda persona tiene derecho a la seguridad social que lo proteja contra las consecuencias de la desocupación, de la vejes y de la incapacidad, que proviene de cualquier otra causa ajena a la voluntad, la imposibilite física o mentalmente para obtener los medios de subsistencia”.
Uno de los puntos principales es crear Grupos de personas aptas en el manejo del adulto mayor, por lo que es necesario, entre ellos, tener personal de la salud.
Por lo que tiene que ver con la Organización Mundial de la Salud, define que los grupos de ancianos en situación de vulnerabilidad y riesgo son aquellos que poseen algunas de las características descriptas a continuación:
• Los muy ancianos (los viejos viejos), mayores de 80 años.
• Los que viven solos en una vivienda.
• Las mujeres ancianas, sobre todo solteras y viudas.
• Los que viven en Instituciones.
• Los que están socialmente aislados (individuos o parejas.)
• Los ancianos sin hijos.
• Los que tienen limitaciones severas o discapacidades.
• Las parejas de ancianos en las que uno de los cónyuges es discapacitado o está enfermo.
• Los que cuentan con muy escasos recursos económicos.
Además, sería conveniente agregar como puntos determinantes fundamentales para entender y comprender la situación de vulnerabilidad en la población los siguientes:
• Bajo nivel Sociocultural.
• Carencia de redes de apoyo (muchas veces los gobiernos locales le restan importancia a los grupos de adulto mayores y a la vez le dan paso a redes sociales con limitación.)
• Aislamiento emocional.
Como es bien sabido, La Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento acordó un Plan de Acción Internacional, donde se reconoce que "la calidad de vida no es menos importante que la longevidad y que, por consiguiente, las personas de edad deben, en la medida de lo posible, disfrutar en el seno de sus propias familias y comunidades de una vida plena, saludable, segura y satisfactoria y ser estimadas como parte integrante de la sociedad". Por lo tanto, este proyecto puntualiza que es conveniente adquirir un sitio, una sede propia, para ubicar un hogar de paso a los adultos mayores del barrio de la Pradera, y poder ofrecerle la ayuda necesaria en el desarrollo de su vejes.
Por consiguiente, “la pobreza debe definirse ante todo en términos absolutos y no relativos. Lo que constituye la esencia de la pobreza es la absoluta privación de los bienes, ingresos y recursos necesarios para satisfacer las demandas convencionales de cada sociedad. La definición de pobreza debe por lo tanto establecer ciertos estándares mínimos en términos de capacidades de diferentes tipos, esto es: capacidad de estar libre de hambre, de la desnutrición, de tener una vivienda adecuada, de participar en la vida de comunidad, etc. Aquellas personas que no logren alcanzar ese nivel absoluto del estándar fijado serán clasificados como pobres, sin importar cuál sea su posición relativa respecto a los demás.”
